Cuando alguien se va...

El sábado falleció un amigo. No era un amigo cercano, ni de esos que frecuentaba todo el tiempo. No era un amigo íntimo y seguramente si desde el más allá me vio llorar cuando me enteré de su muerte, se debe haber sorprendido.

Lloré por su recuerdo, por su familia, por sus hijas chiquitas.

Lloré porque a pesar de ser consciente de sus defectos, reviví una a una cada una de sus virtudes, su eterno cariño, su generosidad.

Recordé la cantidad de Gin con pomelos que me sirvió en su barcito pintoresco de Paso de los Toros, sus abrazos cada vez que me veia, su tono típico del interior, el amor por sus hijas, por sus padres, por su mujer.

Recordé perfectamente el impacto al enterarme de su enfermedad, en un momento en el que todo el mundo se alejaba o tenia miedo a acercarse, el abrazo que le dí cuando lo vi por primera vez después de la noticia.

Me quedo con su fortaleza, que lo hizo vivir 14 años con esa enfermedad de mierda, apostando al futuro, a su familia, que pese a los riesgos decidió agrandar.

Me quedo con el amor que le dio a sus hijas, a sus padres, a su mujer y a sus amigos.

Hasta luego Polla, estarás por siempre en mi corazón.

Gustos...

Me encantan:

Los bizcochos con dulce de leche.

Las margaritas amarillas.

Leer libros de Stephen King.

Mirar tele en invierno tapada con una frazada.

Ir al cine y comprarme una caja de pop grande (aunque no llegue a comer ni la mitad).

La Amarula.

Tomarme una cerveza en verano, sentada en algún barcito por ahí con una amiga.

Que me comenten las publicaciones en facebook.

Guillermina cuando la despierto, intentando abrir los ojos con cara de mimosa total.

Hacer videos con movie maker.

Escribir pavadas...

Odios...

Odio los porteros de los edificios que barren las hojas con la manguera como si fueramos a tener agua por la eternidad.

Odio a los guardas de omnibus que dicen "un pasito más que hay lugar" cuando vas como ganado.

Odio los abrefácil que jamás son fáciles de abrir.

Odio las baldosas flojas de la vereda.

Odio las viejas impertinentes que te pasan por arriba para subir antes al ómnibus, o sentarse en un asiento, o para ganarte en la cola del supermercado.

Odio que me den 240 gr de jamón si pedí 200.

Odio el olor a café molido que había en los Manzanares de mañana temprano.

Odio que se cuelgue la impresora cuando necesito imprimir algo importante.

Odio a Suavechito (no tiene una explicación lógica, pero lo odio)

To be continued...

Cortitos

El sonido del silencio hizo tanto eco en mi cabeza, que todavía siento un silbido en los oídos. La comunicación del alma tiene esas cosas.

Miro a mi hija y todavía no lo creo. Es un pedacito de mi, con pintitas de otra persona.

Cuando miro la luna pienso en vos y me doy cuenta que podrías estar mucho más lejos.

En el cuento de la vida, el final feliz lo escribe cada uno.

Llegaste a mi vida para destruirme en pedacitos. Ahora de mi depende armar de nuevo el rompecabezas y formar algo mejor.

Mi ego definitivamente no se corresponde con la imagen que me devuelve el espejo.

Se vieron, se gustaron, se hablaron, se amaron. Caminaron juntos por la vida, hasta que se separaron. Todavía están buscando encontrarse nuevamente.

En las puertas del infierno había un cartel que decía: Pase solamente si cree que puede repetir los mismos errores, pero sin cargo de conciencia.

La nena miró su madre y dijo: ¿Por qué la luna está allá arriba? La madre contestó: Porque si estuviera cerca ya le habrían instalado una fábrica de celulosa.

El mundo está lleno de ciegos que no quieren ver, de sordos que no quieren oír y de mudos que no quieren hablar. El mundo tiene capacidades diferentes.

Tanto nos acostumbramos a mentirnos a nosotros mismos, que al final no sabemos si existimos o eso también lo inventamos.

Los mejores cuentos sobre Guillermina

1- Se desperto temprano, fue a mi cuarto, me habló como si yo estuviera despierta, me preguntó cosas, me pidió el desayuno, entró salió mil veces. En un momento se quedo pintando en el living, yo me levanté, salí del cuarto y justo estaba arrancando la hoja de un cuaderno y me dice:

"Uy mamá perdón, te desperté con el ruido de la hoja?" CUACK!

2 - Un día me pidió dulce de leche en un platito. Yo agarré una cuchara, la llené de dulce de leche y la puse en el plato (aclaro que no saque el dulce de la cuchara, simplemente la apoyé). Le doy el plato y grita:

"Nooooo, así no queriaaaaaaaaaaa, quería en el platooooooo"

Entonces le digo: "Guille, así se le habla a la mamá?"

Y me contesta: "No no, no te decía a vos, le decía a la cuchara".

3 - Ayer preguntó: "Mamá, por qué el novio de Cuqui es igualito al padre de Clarita?" (el Novio de Cuqui es mi primo Rodrigo y el padre de Clarita su hermano Ramiro)

4 - Veníamos en el auto de mi suegro y Guille preguntó: "Por que el aburiel cambió la camioneta por este auto? A mi me gustaba más la camioneta". Trate de explicarle pero nada le venia bien, entonces le digo : "Lo que pasa que piso una piedra con la camioneta y se rompió". Entonces me mira y me dice: "Mamá, me estás diciendo una mentirita? Porque eso de la piedra suena increible".

5 - Mi madre vive comprandole juguetes y regalos. Un día viene Guille y me dice: "Mamá, para mi que la Abu Tere es amiga de los Reyes Magos".

Ya me acordaré de otras...

Algunas verdades sobre mí

Soy hábil declarante, vendo de mi lo que quiero que los demás compren.

Me enojo con facilidad, soy sensible por demás y muchas veces paso por densa. Aunque digo no ser rencorosa lo soy, reclamo, exijo, pido, me acuerdo, guardo, digo, reprocho...

Doy todo por los que quiero y lo mínimo indispensable para los que no, pero siempre doy. Me gusta recibir gestos de los demás mucho más de lo que admito.

Soy feliz cuando me demuestran que piensan en mi. Con un te quiero me dejan mucho más contenta de lo que se imaginan.

Demuestro fortaleza la mayoría de las veces, pero no se defenderme. Sufro demasiado si me atacan sin razones y generalmente mi respuesta es el llanto.

No me cuesta tanto defender a los demás como defenderme a mi. Me duele cuando los demás no me defienden.

Me gustaría ser más organizada, pero me embolan las estructuras, entonces usualmente me encuentro en un problema existencial...

Estoy feliz con mi vida, pero me gustaría hacer un millón de otras cosas también.

Abarco mucho más de lo que soy capaz de llevar a cabo. Me frustro con mucha facilidad.
Para mi lo que hago nunca es suficiente, siempre quiero ir por más.

Puedo ser falsa, amoldarme a los lugares y a las personas segun la situación, pero no puedo ser hipócrita conmigomisma. Odio mentirme a mi mas que mentirle a los demás. Muchas veces el intento por hallar mi propia verdad, me ha llevado por caminos más difíciles de los que me hubieran tocado si me hacía la boluda. No puedo esquivar obstaculos, disfruto de saltarlos aunque venga un porrazo luego.

Mi ego no se corresponde con la imagen que me devuelve el espejo, pero no me importa...Me la creo igual. De hecho, soy tan egocéntrica, que dediqué no se cuantos renglones a hablar de mi. ;o)

Cuando todo lo que podía salir mal, salió mal...

Estaba sentada frente a la compu, deliberando si ir o no ir a hacerme una placa de una muela para ir luego al dentista. Mi duda existencial era si me hacia la placa (que no sabía si iba a necesitar) o no.
Me acorde de una charla con un amigo, en la que coincidiamos que cuando da pereza hacer las cosas y las postergamos, lo único que hacemos es postergar la pereza. Me armé de valor y fui a hacerme la placa.
De tanto deliberar sali con la hora justa. Llegué y en este orden hice el tramite.
1 - Cola para pagar la placa (despues de hacer la cola, sugerida por mi marido, me comunicaron que primero tenia que hacer "el ingreso").
2 - Cola para hacer el ingreso.
3 - Nuevamente cola para pagar la placa.
4 - Cola en donde me hice el ingreso para sacar numero para la placa.
5 - Esperar que me llamen para la placa
6 - Hacerme la placa
7 - Esperar el resultado.

Todo el trámite me llevó un buen rato, entonces tuve que tomarme un taxi para llegar a la odontóloga a tiempo.
El taxi iba a 45 (literalmente) y mientras ibamos por unas calles de adoquines pensé en la frase "despacito por las piedras". Ganas de taxicidio.
Llegué en hora.
La puerta del consultorio decia "Golpee y espere a ser atendido". Golpee tres veces y nada...
A los 20 minutos apareció una asistente dental y me dijo "La Dra está almorzando, ya viene".
PUTA QUE LA PARIÓ (perdon por la expresión)
Llegó 10 minutos más tarde, para decirme que ella no realiza el trabajo que necesitaba hacerme y que cuando vuelva a ir (con otra odontologa), me haga otra placa.
=)

Una definición de amor

El otro día me preguntaba una amiga, cuál era mi opinión sobre el amor para toda la vida.

Esa es una pregunta que he tratado de responderme durante mucho tiempo y que recién ahora, pisando los 30 y luego de varios desengaños puedo responder con propiedad.

El amor para toda la vida NO EXISTE.

Yo si creo que una pareja puede durar toda la vida si alimenta y cultiva el cariño, el afecto, el compañerismo, pero la prueba de que el amor eterno no existe, es muy simple.

¿Cuantas personas conocés que han sufrido por amor alguna vez? Muchas ¿verdad?

Y ¿Cuantas de ellas luego de dos años seguían sufriendo por esa persona?

Estoy segura que son menos, ¿No?

Creo que si el amor durara para toda la vida, nadie superaría una ruptura, no existirían las infidelidades, ni los altibajos matrimoniales, ni los divorcios, etc...

Por eso lo que dura es el compañerismo, el respeto, la fidelidad, el cariño y todo lo que hace a una pareja. El amor, por si solo no sobrevive. Necesita ser cultivado.