Estoy gorda, pesada, pasada de kilos...Si me miro al espejo lo veo, pero si cierro los ojos lo siento...
Hace años le busco una explicación que quizás no tenga...Entonces hoy decidí escribir este post.
Quiero bajar de peso, pero voy a empezar por el peso que siento cuando cierro los ojos.
Quiero liberarme de culpas y dejar libres a los que me llenaron de rencor alguna vez.
Hoy libero de culpas a quienes me rompieron el corazón. Quienes alguna vez se aprovecharon de mi, y me hicieron más vulnerable. Hoy me libero de la culpa de no haber sido más fuerte, o más coherente, o más astuta. Hoy soy libre de la remota posibilidad de lo que no fui.
Libero de culpas a los que me traicionaron, los que menoscabaron mi confianza una y otra vez y se aprovecharon de mis oportunidades. A los que no fueron honestos conmigo, a los que me mintieron mirándome a los ojos. Y me libero de la culpa de haber mentido, de haber traicionado, de haber sido deshonesta conmigo. Hoy me perdono y te perdono. Hoy te dejo ir.
Libero de culpas a los que no supieron o no saben seguir a mi lado en el camino de la vida, como pareja, como amigo, como familia. Me libero de la culpa de no haber sabido mantenerlos a mi lado.
Libero a mis padres de todos los errores que yo pueda cometer. No son culpables de nada. Me libero de la culpa de las expectativas que no pude llenar.
Hoy quiero ser libre de culpar y que me culpen.
Hoy quiero ser libre.
Solo por hoy.
Al menos solo por hoy.
Maruxionando
La esperanza es cosa buena, quizá la mejor de todas, y las cosas buenas nunca mueren. Stephen King
22 sept 2018
9 jul 2018
Defensora de pleitos perdidos
Mi madre me enseñó cuando era chica que de todas las cosas
malas siempre hay un aprendizaje y algo bueno que rescatar. De esa forma viví
gran parte de mi vida justificando todo lo malo que me pasaba y buscándole la
enseñanza.
Mi hermana me decía que antes de juzgar a una persona había
que pensar por qué situación estaría pasando para actuar de esa manera.
Entonces comencé a encontrarle justificación a todos los actos de los demás.
Desde chiquita me decían “defensora de pleitos perdidos” o “ahí
estás, peleando contra los molinos de viento”. Y yo me calentaba. ¿Cómo podía
ser que no se dieran todos cuenta que a los más desprotegidos había que
defenderlos?
Crecí dándome la cabeza contra la pared, convencida que
había que actuar bien sin importar cómo actuaran los demás.
Mi mayor defecto: Por mucho tiempo creí que era “decir las
cosas, defendiendo mis ideales”. Hoy me doy cuenta que mi peor defecto es
querer estar en paz con todo el mundo.
Un día alguien me dijo que no todos me iban a querer. No
importa si soy buena o mala (eso explica por qué hay cada hijo de puta en la
vuelta lleno de alcahuetes alrededor).
Somos reflejos de los defectos de otros, y los defectos de
otros nos reflejan a nosotros.
Con el tiempo aprendí que desilusionarse de las personas no
está mal. Que hay que elegir a quién se quiere y valorar al que te quiere bien.
El que te quiere a medias, el medio amigo, el que te acepta
algunas cosas y otras no…ese no se merece empatía ni justificación. Ese se
merece que lo dejes libre, en la búsqueda de otro más completo que vos que
colme sus expectativas.
Siempre se rieron de mi por tener muchos amigos. Sin embargo,
son pocas las personas a las que considero cercanas a mi vida.
Sigo aprendiendo que cuánto más nos cuidamos del afuera,
cuánto más cerrado es el círculo, (con ciertas exigencias, obvio), más libres
somos, menos sufrimos, menos solos nos sentimos.
Rodearnos de gente que no cree en nosotros, que nos
desconoce ante el primer boicot, que no nos defiende cuando
más la necesitamos no nos sirve de nada.
Yo, por lo pronto, seguiré defendiendo los pleitos perdidos
y peleando contra los molinos de viento, siguiendo mis ideales y defendiendo a los que quiero.
Mientras, Viviendo y aprendiendo.
5 nov 2017
Reflexiones pisando los 40
No me voy a hacer la linda...Me creo una pendeja. Siempre me he creido una pendeja.
No se si porque soy la hermana menor, porque nunca maduré el vestuario, o simplemente porque tengo alma de más chica.
Lo cierto es que estoy cayendo en la cuenta de que ya estoy grande.
Estoy a 23 horas de cumplir 38.
Me acuerdo tan clarito cuando le pregunté a mi mamá ¿Cuántos años tenés? Y me contestó 37 y una rayita (37 y pico...37 y un puntito era 37 y poco). Yo tenía 6 años.
También me acuerdo cuando tenía 16 como si fuera ayer. De esa anécdota habían pasado diez años no 32...y mi vida hacía diez años era totalmente distinta...como ahora.
Llegar a los 38 caminando sin saber bien el rumbo a donde me dirijo, debo reconocer que no era parte ni de mis planes ni de mis proyectos de vida. Las cosas se dieron así.
La vida te sorprende minuto a minuto. A veces uno cree tener todo planeado y de golpe se encuentra a tientas en la oscuridad. Otras veces estamos dando manotones en la oscuridad y alguien simplemente aprieta el interruptor y nos ilumina de golpe.
¿Y cuál es el rumbo que quiero caminar? ¿Hacia donde quiero ir?
Yo solo quiero ser feliz la mayor parte del tiempo posible.
Ya no me importa que me depara el futuro ni que cosas hice mal en el pasado.
Miro a mi alrededor y me siento feliz de lo que tengo, valoro lo que me queda.
Lo que no está, lo dejo ir...lo saludo, lo despido, lo suelto.
Lo que viene, lo recibo, lo abrazo, lo celebro.
38 años.
Estoy orgullosa de mi aunque suene que me estoy haciendo la linda.
Ya no soy una pendeja no, pero todavía me siento como si lo fuera.
Estoy feliz por mis logros, por mis valores, por mis aprendizajes y por mis aciertos.
Este año casi muero y volví a nacer. Se podría decir que de verdad soy jóven no?
Salud 38 años.
Salud Maru.
Hakuna Matata.
No se si porque soy la hermana menor, porque nunca maduré el vestuario, o simplemente porque tengo alma de más chica.
Lo cierto es que estoy cayendo en la cuenta de que ya estoy grande.
Estoy a 23 horas de cumplir 38.
Me acuerdo tan clarito cuando le pregunté a mi mamá ¿Cuántos años tenés? Y me contestó 37 y una rayita (37 y pico...37 y un puntito era 37 y poco). Yo tenía 6 años.
También me acuerdo cuando tenía 16 como si fuera ayer. De esa anécdota habían pasado diez años no 32...y mi vida hacía diez años era totalmente distinta...como ahora.
Llegar a los 38 caminando sin saber bien el rumbo a donde me dirijo, debo reconocer que no era parte ni de mis planes ni de mis proyectos de vida. Las cosas se dieron así.
La vida te sorprende minuto a minuto. A veces uno cree tener todo planeado y de golpe se encuentra a tientas en la oscuridad. Otras veces estamos dando manotones en la oscuridad y alguien simplemente aprieta el interruptor y nos ilumina de golpe.
¿Y cuál es el rumbo que quiero caminar? ¿Hacia donde quiero ir?
Yo solo quiero ser feliz la mayor parte del tiempo posible.
Ya no me importa que me depara el futuro ni que cosas hice mal en el pasado.
Miro a mi alrededor y me siento feliz de lo que tengo, valoro lo que me queda.
Lo que no está, lo dejo ir...lo saludo, lo despido, lo suelto.
Lo que viene, lo recibo, lo abrazo, lo celebro.
38 años.
Estoy orgullosa de mi aunque suene que me estoy haciendo la linda.
Ya no soy una pendeja no, pero todavía me siento como si lo fuera.
Estoy feliz por mis logros, por mis valores, por mis aprendizajes y por mis aciertos.
Este año casi muero y volví a nacer. Se podría decir que de verdad soy jóven no?
Salud 38 años.
Salud Maru.
Hakuna Matata.
29 jul 2016
El Cerezo
Era una noche de primavera de
hace ya como ocho años.
Había tenido una discusión
con mi (entonces) esposo y salí llorando de mi casa. Necesitaba caminar, tomar
aire, desahogar.
Mi hermana vivía cerca de
casa, la llamé y me tomé un taxi hasta su casa.
El recorrido a debía ser una simple L, eran no más de 7 cuadras sin cero misterio. Iba
mirando el celular cuando veo que el taxista dobla un poco antes. Levanto la
cabeza y me dice:
- No te asustes, no te voy a hacer nada. Es
más, voy a apagar el contador de fichas. Me quiero desviar un momentito. Créeme
que vale la pena.
Debo reconocer que me asusté
al instante, pero era tan cerca dónde me llevaba, y en realidad seguía de
camino a lo de mi hermana, que a menos de dos minutos ya estaba tranquila.
Agarró una callecita oscura
y paralela a la que veníamos y a la media cuadra paró. Ya no tenía miedo. No me
inspiraba amenaza alguna.
-
- ¿Ves ese árbol? – Me dijo señalando un árbol
de mediano tamaño, lleno de florcitas rosa blancuzcas.
- Sí, Divino.- le contesté.
- Es un Cerezo. He pasado miles de veces por
acá y nunca lo había visto en flor hasta hace un tiempo. La primera vez que lo
vi, tenía un día como el tuyo de hoy. Algo se me vino a la mente y es eso lo
que quiero compartir. Durante
mucho tiempo del año este árbol permanece sin flores y es un árbol cómo
cualquier otro. Esta cuadra pasa totalmente desapercibida si no está en flor.
Pero hay una época en el año en que florece y muestra todo lo bello de sí. A
veces, las cosas no son tan malas como parecen, solo es necesario esperar a que
lo bueno pueda florecer. No sé
lo que estás pasando, te vi mal y quise compartirlo contigo.
Desde ese día me desvío siempre
que puedo para pasar por allí. A veces el cerezo está sin flores, para
recordarme que todo pasa. Otras veces lo veo en flor, y me acuerdo de ese
señor, que sin conocerme, me dio un lindo mensaje de vida, que tengo presente
en todo momento.
8 mar 2016
Día de la Mujer
Creo que el mejor homenaje a la igualdad de género, es no diferenciarnos. Por eso no creo en el Día de la Mujer.
Por cierto, tampoco creo en la igualdad de género.
No somos iguales!! Somos distintos!!
No quiero ser igual a los hombres, de hecho, tampoco quiero ser igual a nadie más que a mí.
No entiendo por qué nos pasamos tanto tiempo "peleando" por ciertas cosas.
Sí considero que debemos ser iguales ante la ley.
Sí creo que tenemos que tener igualdad de posibilidades en algunas cosas. Pero también considero que debemos evolucionar de otra manera como sociedad...y no los hombres o las mujeres...TODOS.
No me gustan las cosas forzadas. No todas las mujeres son excelentes (ni todos los hombres).
El mundo está lleno de mujeres incapaces ocupando "cuotas" en lugares que requieren de una determinada cantidad de mujeres (por ejemplo Gobiernos), que no están capacitadas.
Creo en un mundo en el que los hombres deberían hacer más cosas de mujeres, como lavar platos, cuidar hijos, cambiar pañales...y no tanto en pelear por igualar desigualdades.
Por cierto...estoy feliz de ser mujer y de ser quien soy. Me considero capaz de hacer lo que me proponga sin importar lo que se propongan quienes tengo al lado.
Jamás permitiré que un hombre ejerza violencia de ningún tipo sobre mi y espero que ningún hombre tolere violencia de mi parte.
Conozco hombres que merecen mucho más tener un día, que varias mujeres que rondan por mi vida.
Dejémonos de hipocresías. Feliz día todos los días. Seamos mejores personas y ya. Seamos más compañeros y ya. Seamos menos caraduras y ya...
Todos los días un poquito y vamos a conseguir un mundo mejor.
No me siento representada hoy...Hoy no es mi día...Mis días son todos...y los tuyos también.
Por cierto, tampoco creo en la igualdad de género.
No somos iguales!! Somos distintos!!
No quiero ser igual a los hombres, de hecho, tampoco quiero ser igual a nadie más que a mí.
No entiendo por qué nos pasamos tanto tiempo "peleando" por ciertas cosas.
Sí considero que debemos ser iguales ante la ley.
Sí creo que tenemos que tener igualdad de posibilidades en algunas cosas. Pero también considero que debemos evolucionar de otra manera como sociedad...y no los hombres o las mujeres...TODOS.
No me gustan las cosas forzadas. No todas las mujeres son excelentes (ni todos los hombres).
El mundo está lleno de mujeres incapaces ocupando "cuotas" en lugares que requieren de una determinada cantidad de mujeres (por ejemplo Gobiernos), que no están capacitadas.
Creo en un mundo en el que los hombres deberían hacer más cosas de mujeres, como lavar platos, cuidar hijos, cambiar pañales...y no tanto en pelear por igualar desigualdades.
Por cierto...estoy feliz de ser mujer y de ser quien soy. Me considero capaz de hacer lo que me proponga sin importar lo que se propongan quienes tengo al lado.
Jamás permitiré que un hombre ejerza violencia de ningún tipo sobre mi y espero que ningún hombre tolere violencia de mi parte.
Conozco hombres que merecen mucho más tener un día, que varias mujeres que rondan por mi vida.
Dejémonos de hipocresías. Feliz día todos los días. Seamos mejores personas y ya. Seamos más compañeros y ya. Seamos menos caraduras y ya...
Todos los días un poquito y vamos a conseguir un mundo mejor.
No me siento representada hoy...Hoy no es mi día...Mis días son todos...y los tuyos también.
9 feb 2016
Rombai ¿Papelón?
He estado leyendo en estos días las críticas a la presentación de Rombai en Argentina.
Parece que quienes critican ya tienen sus entradas en mano para los Rollings y esperaban un show a la altura de las circunstancias.
Siempre pienso que a veces los uruguayos somos tan negativos, que nos condenamos a que nada de lo que pasa acá y triunfa, goce con el beneplácito de la gente (más allá de los gustos obviamente).
Cuando fueron a ver a Rombai ¿Qué esperaban ver? ¿A Pavarotti? La música debe transmitir! Y a mi lo único que me transmiten los nuevos grupos de "Cumbia Cheta" -como les llaman despectivamente- son ganas de bailar. Después de todo ¿Ese debería ser el fin no?
Me molesta la hipocresía de la gente, que se juega con el discurso de la "igualdad", la "diversidad", etc...y no puede tolerar que a un grupo de "chicos bien" les vaya fenomenal en el mundo del espectáculo. (Tan fenomenal como le va al "Gucchi" y al "Reja", pero claro, ellos son "pueblo" entonces con ellos no pasa nada, nadie está pendiente de si desafinan o no.)
Me da mucha bronca por los chicos de Rombai, que seguramente estén disfrutando de su éxito (pero no dejan de ser unos guachos de veintipocos años) tengan que comerse este trago amargo, en medio de sus 15 minutos de fama, porque nosotros no sabemos ser menos exigentes a la hora de juzgar y dejarnos llevar por las cosas simples de la vida.
Don Manuel, Doña Rosa! Si no le gusta Rombai, cambie la radio, apague la tele, váyase del cumpleaños! Pero no critique porque es gratis! Así nos va como nos va!
El papelón es nuestro Don Manuel. Los bochornosos somos nosotros Doña Rosa!
Parece que quienes critican ya tienen sus entradas en mano para los Rollings y esperaban un show a la altura de las circunstancias.
Siempre pienso que a veces los uruguayos somos tan negativos, que nos condenamos a que nada de lo que pasa acá y triunfa, goce con el beneplácito de la gente (más allá de los gustos obviamente).
Cuando fueron a ver a Rombai ¿Qué esperaban ver? ¿A Pavarotti? La música debe transmitir! Y a mi lo único que me transmiten los nuevos grupos de "Cumbia Cheta" -como les llaman despectivamente- son ganas de bailar. Después de todo ¿Ese debería ser el fin no?
Me molesta la hipocresía de la gente, que se juega con el discurso de la "igualdad", la "diversidad", etc...y no puede tolerar que a un grupo de "chicos bien" les vaya fenomenal en el mundo del espectáculo. (Tan fenomenal como le va al "Gucchi" y al "Reja", pero claro, ellos son "pueblo" entonces con ellos no pasa nada, nadie está pendiente de si desafinan o no.)
Me da mucha bronca por los chicos de Rombai, que seguramente estén disfrutando de su éxito (pero no dejan de ser unos guachos de veintipocos años) tengan que comerse este trago amargo, en medio de sus 15 minutos de fama, porque nosotros no sabemos ser menos exigentes a la hora de juzgar y dejarnos llevar por las cosas simples de la vida.
Don Manuel, Doña Rosa! Si no le gusta Rombai, cambie la radio, apague la tele, váyase del cumpleaños! Pero no critique porque es gratis! Así nos va como nos va!
El papelón es nuestro Don Manuel. Los bochornosos somos nosotros Doña Rosa!
28 dic 2015
A mi
-Hey vos! Si si
vos! Te quiero!
-A mi? Nahh no mientras. Si te borraste!
-Borrarme yo? No inventes!
Vos me borraste!
- Ah bueno... Nos vamos a pasar todo el día pasándonos la
pelota? X q te fuiste?
- Es q me pareció que cada vez teníamos menos cosas en
común. Cada vez q yo quería aparecer algo mejor surgía y siempre quedaba para
después. intente una, dos, tres, cien veces y me cansé.
- Perdón. No me di cuenta.
Cuando quise ver te habías ido. ¿Y ahora X q volviste?
- Porque me llamaste.
- ¿Yo? No recuerdo cuando.
- El día q miraste por la ventana del avión te acordas? Me
pareció que eras vos pero no me animé a asomarme del todo. Después me llamaste
de nuevo cuando pintaste aquel castillo y lloraste mientras pedías los deseos
mirando los fuegos artificiales del Wishes en Disney.
-Ahora que me lo decís puede ser...
-... pero sabes cuando me encontraste? Cuando te sentaste
con esa guitarra, tu guitarra...Y tocaste...Y la música me trajo a vos. Ahora
chau! Te quiero!
- No te vayas! Todavía te necesito!
- No me necesitas. Vos ya me encontraste. Perdón. Vos te
encontraste.
- Pero ya no soy igual a vos!
- No. Ahora sos mucho mejor. No lo olvides.
27 dic 2015
Año nuevo, y qué?
Todos los años a esta altura se me da por reflexionar. La gente pide reflexión (mentira, la única que una vez la reclamó fue mi amiga Gabriela, y yo me la re creí).
No quiero ser reiterativa, es como la 5ta nota que escribo consecutiva y siempre termino redondeando en lo mismo...que las metas, que las promesas, que disfrutar, que la vida es corta.
Ahora me pregunto por qué exactamente creemos que el 1ro de enero va a cambiar algo? Es como "empezar la dieta el lunes" o "tirate que hay arenita".
El momento de cambiar es el momento de cambiar. El "tengo que" debería ser erradicado y suplantado por un "voy a", pero no en el futuro, sino en el preciso momento en que voy a hacerlo.
No hay meses para el cambio, como dice la canción de Attaque, "...solo el cambio es lo único que permanece en el tiempo, incondicional".
No hay días para reflexionar y días para no reflexionar. Seamos reflexivos siempre!
La gente se amarga en ésta época, se acuerda de los que no están (como si el resto del año estuvieran), se lamentan de las desgracias (como si el resto del año fueran distintos).
Yo elijo reflexionar siempre, cambiar siempre y vivir siempre.
Feliz día a día para todos!
Salud
No quiero ser reiterativa, es como la 5ta nota que escribo consecutiva y siempre termino redondeando en lo mismo...que las metas, que las promesas, que disfrutar, que la vida es corta.
Ahora me pregunto por qué exactamente creemos que el 1ro de enero va a cambiar algo? Es como "empezar la dieta el lunes" o "tirate que hay arenita".
El momento de cambiar es el momento de cambiar. El "tengo que" debería ser erradicado y suplantado por un "voy a", pero no en el futuro, sino en el preciso momento en que voy a hacerlo.
No hay meses para el cambio, como dice la canción de Attaque, "...solo el cambio es lo único que permanece en el tiempo, incondicional".
No hay días para reflexionar y días para no reflexionar. Seamos reflexivos siempre!
La gente se amarga en ésta época, se acuerda de los que no están (como si el resto del año estuvieran), se lamentan de las desgracias (como si el resto del año fueran distintos).
Yo elijo reflexionar siempre, cambiar siempre y vivir siempre.
Feliz día a día para todos!
Salud
6 dic 2015
Felicidad en las pequeñas cosas...Chau 2015! #SuerteEnPila
La vida es un viaje, un camino, un libro, una historia, una película, una canción...
La vida es UNA, esa es mi conclusión (y quedó en rima).
Este año aprendí eso...no hay otra chance de rehacer nada, ni de volver a vivir nada. Cada segundo que pasa de nuestra vida es irrepetible y lo que hagamos de él es justamente lo que nos hace a nosotros mismos.
Me he cansado de pensar en definir la felicidad, de leer sobre valorar lo que se tiene, luchar por las metas, etc...y hoy escribiendo esta nota, tras una charla con un amigo, estoy en condiciones de decir que este año descubrí lo más importante que pude haber descubierto en toda mi vida.
La felicidad está en uno mismo.
Es cierto que hay personas y cosas que nos hacen felices. Pero todo es efimero. Lo material es efimero, las personas son efimeras. Mientras vivamos lo único, único, único que se mantiene con nosotros, somos nosotros mismos.
Por eso no hay que buscar la felicidad...Hay que SENTIR la felicidad.
Felicidad en pequeñas cosas, como escuchar una canción, mirar un lindo paisaje, admirarse por una respuesta acertada en el momento exacto, o desafinar una canción mientras caminás por la calle.
Felicidad de compartir momentos con otros, o con vos. Mirar un atardecer y decir wooow, que lindo regalo me estoy dando.
Hace un tiempito he decidido darme esos pequeños regalos. El otro día iba caminando de noche por la rambla, y la luna estaba hermosa -bien bien finita- y se reflejaba de una manera peculiar en el agua dando un tono rojizo. Estaba justo llegando a la ANCAP de Bulevar Artigas y la Rambla, en esa partecita oscura antes de la estación, caminé unos pasos hacia el agua y me senté en la oscuridad a observar ese paisaje mágico. Fui feliz por esos minutos mientras lo miraba.
Otras veces soy feliz sentada en el estanque de la Facultad mirando el agua verdosa -esa que tanto critican algunos pero que està llenita de peces y tortugas-. Muchos dicen que es horrible. Para mi es uno de los lugares más lindos del mundo. Ahí soy feliz, porque me felicito cada día por la decisión que tomé de estar en ese lugar. Y me siento en ese lugar y soy feliz.
Soy feliz cada vez que Guille o Fran demuestran ser un pedacito de mi. Cada vez que transmiten los valores que yo les inculqué, incluso cada vez que hacen cosas "tan mías", especialmente Guille que heredó mi humor ácido y tiene esas salidas que sin lugar a dudas son producto de la genética =)...
Soy feliz al ver en quién me convertí, con todos los errores que cometo todos los días. Este año, uno de los años más duros de mi vida, aprendí a ser feliz por mí y para mí. Me rindo tributo todos los días y aunque a veces derrapo y me pierdo, siempre vuelvo a encontrarme. Adiós laberintos, ya tengo mi gps!
Me encanta la Maru Mujer en la que me convertí, y pese a que este fue un año de MIERDA en la mayoría de los sentidos, siento que no necesito que se muera nadie más para entender que no hay otra chance...que la vida es esta. Y que tengamos o no tengamos las cosas materiales que queremos, tengamos o no tengamos al lado a quien amamos, estemos solos o acompañados, todos nos tenemos a nosotros mismos. Todos tenemos un atardecer que mirar, un reflejo de luna que admirar y un momento de felicidad para regalarnos.
Feliz año para todos! Que el 2016 te regale 365 momentos de felicidad!
La vida es UNA, esa es mi conclusión (y quedó en rima).
Este año aprendí eso...no hay otra chance de rehacer nada, ni de volver a vivir nada. Cada segundo que pasa de nuestra vida es irrepetible y lo que hagamos de él es justamente lo que nos hace a nosotros mismos.
Me he cansado de pensar en definir la felicidad, de leer sobre valorar lo que se tiene, luchar por las metas, etc...y hoy escribiendo esta nota, tras una charla con un amigo, estoy en condiciones de decir que este año descubrí lo más importante que pude haber descubierto en toda mi vida.
La felicidad está en uno mismo.
Es cierto que hay personas y cosas que nos hacen felices. Pero todo es efimero. Lo material es efimero, las personas son efimeras. Mientras vivamos lo único, único, único que se mantiene con nosotros, somos nosotros mismos.
Por eso no hay que buscar la felicidad...Hay que SENTIR la felicidad.
Felicidad en pequeñas cosas, como escuchar una canción, mirar un lindo paisaje, admirarse por una respuesta acertada en el momento exacto, o desafinar una canción mientras caminás por la calle.
Felicidad de compartir momentos con otros, o con vos. Mirar un atardecer y decir wooow, que lindo regalo me estoy dando.
Hace un tiempito he decidido darme esos pequeños regalos. El otro día iba caminando de noche por la rambla, y la luna estaba hermosa -bien bien finita- y se reflejaba de una manera peculiar en el agua dando un tono rojizo. Estaba justo llegando a la ANCAP de Bulevar Artigas y la Rambla, en esa partecita oscura antes de la estación, caminé unos pasos hacia el agua y me senté en la oscuridad a observar ese paisaje mágico. Fui feliz por esos minutos mientras lo miraba.
Otras veces soy feliz sentada en el estanque de la Facultad mirando el agua verdosa -esa que tanto critican algunos pero que està llenita de peces y tortugas-. Muchos dicen que es horrible. Para mi es uno de los lugares más lindos del mundo. Ahí soy feliz, porque me felicito cada día por la decisión que tomé de estar en ese lugar. Y me siento en ese lugar y soy feliz.
Soy feliz cada vez que Guille o Fran demuestran ser un pedacito de mi. Cada vez que transmiten los valores que yo les inculqué, incluso cada vez que hacen cosas "tan mías", especialmente Guille que heredó mi humor ácido y tiene esas salidas que sin lugar a dudas son producto de la genética =)...
Soy feliz al ver en quién me convertí, con todos los errores que cometo todos los días. Este año, uno de los años más duros de mi vida, aprendí a ser feliz por mí y para mí. Me rindo tributo todos los días y aunque a veces derrapo y me pierdo, siempre vuelvo a encontrarme. Adiós laberintos, ya tengo mi gps!
Me encanta la Maru Mujer en la que me convertí, y pese a que este fue un año de MIERDA en la mayoría de los sentidos, siento que no necesito que se muera nadie más para entender que no hay otra chance...que la vida es esta. Y que tengamos o no tengamos las cosas materiales que queremos, tengamos o no tengamos al lado a quien amamos, estemos solos o acompañados, todos nos tenemos a nosotros mismos. Todos tenemos un atardecer que mirar, un reflejo de luna que admirar y un momento de felicidad para regalarnos.
Feliz año para todos! Que el 2016 te regale 365 momentos de felicidad!
8 nov 2015
Mochilas, principios y la mar en coche…
Por alguna
razón –que seguro tiene algo que ver con lo innato y algo que ver con lo
adquirido- soy una de esas personas que todo lo cuestiona. Es raro, porque en épocas del liceo ODIABA
con todo mi ser la Filosofía, ya que no podía entender aquello del “Pienso
luego existo de Descartes”, o el concepto de “El ser y la Nada” de Kant. Y no perdí tiempo tampoco en aprenderlo o
entenderlo demasiado, seguí con mi vida.
Sin embargo
con el tiempo me doy cuenta que me he convertido en una persona crítica
(Gracias a Dios!!! Lo considero una gran virtud) que no puede ir por la vida
esperando que las cosas sucedan y ya…Yo me cuestiono el por qué de las cosas,
trato de relacionarlas con el entorno que me rodea, con mi historia. Un eterno “autosicoanálisis”.
Freud hablaba
del “Ello” (como una manifestación del inconsciente), el “Yo” (como la
manifestación de la conciencia) y el “SuperYo” (como el conjunto de normas
sociales establecidas que limitan al Ello y condicionan al Yo). Así lo entendí
más o menos cuando lo estudié, debe tener su explicación más profunda, no estoy
googleando para escribir esta nota, ni pienso hacerlo, simplemente, apelo a mis
escasos conocimientos de Filosofía de 5to y un poco de cultura general…
Bueno respecto
a Freud creo que quedó en el camino un “CreoYo” que sería quien realmente
quiero ser, más allá de lo que me diga mi inconsciente y lo que dicte la
sociedad. Un Yo intermedio que evalúe todo, desde lo más alocado del deseo,
hasta lo más estricto de la razón.
Una de mis
mejores amigas usa una palabra que me encanta para referirse a su forma de ser.
Es “principista” (mantiene firmes sus principios). Yo siempre lo llamé a eso “mis
valores”, pero me robo su concepto y me autodefino como ella “principista”.
Hay amigos que
algunas veces me han dicho que debo dejar los principios un poco de lado, o no
ser tan estricta en su aplicación. Por ejemplo, cuando la profesora de 5to de
liceo dio todas las preguntas del examen, yo me negué a recibirlas por “principista”.
Todos salvaron y yo no, en un claro boicot a esa “farsa”. Perdí diciembre,
perdí febrero y salvé en julio, gracias a que la profesora me pasó las
preguntas. Dejé los principios de lado, salvé filosofía y hoy soy bachiller. También
le animé el cumple al hijo de la profe de Matemáticas A, para que me pusiera un
7 y exoneré. Dejé los principios de lado y tan mal no me fue. Estoy escribiendo
una nota que empezó hablando de Descartes, Kant y Freud. ¿O no?
Pero esos
principios no me definieron como persona. No soy mejor o peor persona por
copiar en un examen. Soy más tonta por no saber, o no haber aprovechado la
oportunidad de aprender…eso sí no lo discuto. (Y la verdad no he aplicado en
nada en los últimos 18 años las ecuaciones, por lo que ya no me remuerde tanto
la consciencia lo de la profe de Matemáticas).
Entonces por
ser “principista” (o ahora que saqué los trapitos al sol “semiprincipista” o si
fuera título de una película “Principista por conveniencia”) he ido dándole
forma y explicación a mi vida, según el concepto que mi “SuperYo” le ha
manifestado a mi “Yo”, en su eterna lucha con mi “Ello”.
Ahora…en que
quedó mi “CreoYo”? Cuántos de todos esos principios fueron propios o
adquiridos. Cuánto elegí yo ser como soy y cuánto la vida, el entorno, quienes
me rodean eligieron por mí?
Esa pregunta
quizás la responda al final de esta nota, al menos eso es lo que busco. Y si no…seguiré
buscándole la respuesta…No se olviden de aquello del principio “soy una persona
que todo lo cuestiona”. Quizás al terminar la respuesta es que “no lo tengo que
cuestionar”…Veremos…
Entonces surge
el tema de “la mochila”. Cuando nacemos la mamá lleva un bolso enorme de cosas
que necesita para que estemos bien. Mamaderas, termómetro, causalón/perifar
(por si tiene que intercalar), tres mudas de ropa (nunca falta cuando se mea
hasta la nuca y después se hace caca y se le pasa el pañal), ropa por si hace
calor y por si hace frío, la mantita, el calientamemas, el chupete de la siesta
y el de la noche, el nonito, bla bla bla, podría seguir. Vaya responsabilidad
carga la madre (bueno el padre también, pero no estamos hablando de egos de
nadie más que del mío en esta nota así que a llorar al cuartito).
Entonces el
bebé crece y se hace un niñito, y ya anda con su mochilita a cuestas, y la va
cargando en el jardín con un vasito y una servilleta. Después ya va a la
escuela y comienza a cargarla de libros y cuadernos, útiles, cartucheras bla
bla bla, pero cuando llega al liceo es una cuadernola con una bic metida en el
rulo y nada más. Y ahí empieza el problema.
La mochila
deja de ser mochila de verdad, y aparece la mochila imaginaria.
Llega un
momento en la vida en que el mundo que nos rodea comienza a pedir que se
realicen todas las expectativas que depositaron en nosotros mismos, y es
justamente ahí, al final de la adolescencia. Ese momento justo, en el que te
preguntás para qué corno Descartes pensaba si pensaba primero o después de
existir, o para qué corno usarías las ecuaciones si estabas haciendo 5to
Humanístico…Ahí la abuela comienza a querer ver que la nena se vista prolija
como en su época, la tía pregunta si tiene novio, cuándo va a tener novio, por
qué no tiene novio, la tía abuela comenta que “estás gordita, pero estás linda”,
el abuelo pregunta que vas a estudiar, el vecino comenta que increíble que no
te vaya bien en el liceo si ya sumabas dos más dos con tres años…y así se
empieza a cargar la mochila imaginaria.
Y queremos
tener novio para contestarle a la tía, y nos sentimos culpables del jean rotoso
cada vez que vemos a la abuela, y no tenemos ni puta idea qué vamos a estudiar,
y probablemente tomemos una decisión de mierda al respecto y nos cueste
horrores reconocer que nos equivocamos ante los demás por las malditas “expectativas
ajenas” que fuimos cargando en nuestra mochila.
Pero no
termina ahí. Elegimos una carrera y nos metimos en una lucha libre contra el
tiempo. En Uruguay entrás a Arquitectura y te avisan el primer día que el
promedio de la carreara es de 12 años aunque esté armada para hacerse en 6. 12
años! Te asustan, muchos la hacen en 10, (tranquilos compañeros de facu) y la
mochila es cada vez más grande.
Y empezás a
laburar. Y conozco muy pocas personas que laburan de lo que quieren. Y las personas
que dicen que AMAN lo que hacen, son de las personas más estresadas del
universo, porque se autoexigen constantemente y se cargan y cargan y cargan la
maldita mochila.
Y ya la
mochila ya está que explota cuando llega el momento en que te casás y tenés
hijos (si tuviste la suertisima de poder mostrarles a todos en la cara y refregarles
que Si! Lo lograste! Conseguiste marido/mujer y te vas a casar! Si! Casar! Nada
de concubinato (peso extra a mochila ajena) CA SA MIEN TO señores, con fiesta,
regalos, vestido blanco y toda la pompa. Entonces tirás para afuera algunas
cosas de sobran en la mochila imaginaria. Chau “novio/ParaCuandoElCasamiento”,
pero automáticamente aparece el “ParaCuandoElBebe”, seguido del “ParaCuandoElHermanito”
y seguido de “ParaCuandoElTercero” y si tenés cuatro te dicen “ParaCuandoCerrásLaFábrica”,
si tenés cinco estás loca y si tenés seis olvidate, más que mochila un tráiler necesitás.
Por suerte yo
metí dos por una. Metí esposo e hija en el mismo paquete y reconozco que no me
siento identificada con varias de las cosas que puse, pero sé que muchos de los
que leen sí.
La cosa es que
llega el momento en que en la mochila entra el trabajo, las cuentas que pagar,
colegio privado/escuela pública, las comparaciones detestables con fulanito y
menganita que son Spiderman y la Mujer Maravilla, y querés casa propia, y
querés un autito, y querés un viajecito y querés y querés y querés.
Y un buen día
te empieza a doler la espalda y decís por qué me cuesta tanto avanzar. Y Claro!
La tenés ahí colgadita. No se fue…Ya no la carga tu mamá, con la ropita por si
te mandás una cagada. La cagada te la mandás y la cargás vos. Y tenés que
seguir. O mejor te estancás?
Entonces vuelve
el cuestionamiento a tu vida, o aparece algo muchísimo mejor “el velo”.
“El velo” es
el mejor amigo del Status Quo.
Vos no tenés ni idea en qué momento se hicieron amigos, pero ellos son carne y
uña, culo y calzón. Resulta que en algún momento de tu vida, alguien le dijo al
“velo” que si aparecía, el Status Quo se iba a mantener ahí al firme, y así
fue. Te vendaste los ojos, te pusiste un velo adelante y seguiste cargando tu
mochila cómo pudiste. A veces pagaste con tu cuerpo, a veces pagaste con tu
cabecita. A veces con las dos cosas, pero seguiste y mientras el velo y el Status
Quo fueron amigos, vos seguiste adelante.
Pero un día
llegó un “viento” que te tiro al piso e hizo que tu mochila se esparramara por
todas partes. El velo se voló y el Status Quo dijo What? Que es todo este
quilombo…? Hasta luego…
Y te rodeaste de manos queriendo llenar de nuevo
tu mochila. Pero cuando empezaste a juntar las partes para tratar de guardarlas
dijiste “Qué es esto?”, esto ya no lo quiero más, “Y esto??” Pa’ fuera! Pero no
es tan sencillo. Porque hay cosas que se quedaron aferradas adentro, y los
dedos desde afuera te indican que guardar y que no. Y el Status Quo decide
volver y el velo está ahí que quiere pero no quiere. Entonces empieza otra vez
el cuestionamiento. Esto lo guardo? Mmmmm capaz algún día lo necesito. Y esto?
Ay no, no me sirve pero como me duele soltarlo. Y esto otro? Bueno, está claro
que no lo quiero, pero todos me dicen que lo guarde por las dudas.
Qué haces con
tu mochila? La llenás de nuevo o la dejás con lo que realmente necesitás?
Después de
mucho mucho mucho cargar, después de muchos vientos y caídas, de peleas y reconciliaciones
entre el velo y el status quo, yo elijo no cargar más mochilas.
Hoy elijo que
mis principios sean “Semiprincipios”, que mi vida la rija el “CreoYo” y si al
tío o la vecina les duele y ese problema se les mete en su mochila, tendrán que
esperar su viento y su vuelo del velo para sacarse ese problema (mío) de su
mochila.
Hoy me elijo a
mí por encima de todos y elijo no ser parte de la mochila de nadie,
especialmente de mis hijos.
Dice Calamaro “La
vida es una gran sala de espera, la otra es una caja de madera”. Y no señores,
la vida es un caleidoscopio de cosas distintas, lindas, feas, tristes, buenas.
Todo depende de cómo la enfrentemos, de cómo la vivamos y cuánto queramos
cargar durante el recorrido.
Les deseo una
vida con mochilas livianas, sin velos y regida por sus propios “CreoYo”.
Y les dejo mi
dicho preferido (robado a mi hermano) “Mientras el tímido reflexiona, el
valiente va, triunfa y vuelve”
18 sept 2015
Un Paseo por las Nubes
Nunca había
volado en un avión comercial.
Mi máxima
experiencia “por los aires” había sido un fugaz paseo en biplano, a fines del
2003, que no disfruté para nada y que nada tiene que ver con lo que voy a
contar.
Desde que
empezamos a planificar este viaje a Miami/Disney mi mayor preocupación eran los
vuelos. Yo le decía una y otra vez a Andrés, yo organizo absolutamente TODO,
pero por favor, arriba del avión, déjame tomarme una pastillita y ocúpate de
los nenes.
Las cosas de
la vida hicieron que un error de Tam nos ubicara en el vuelo de Montevideo a San
Pablo a los 4 en asientos separados.
Debo reconocer
que el avioncito ese es más parecido a una lata de sardinas que a un jet. Nos
tocó en la última hilera, pegados a los baños. Yo sentada con una pareja,
contra el pasillo. Fran, también contra el pasillo en mi misma hilera, con un
señor y su hijo y en la hilera de adelante, Guille también del lado del
pasillo, con la esposa del señor que iba junto a Fran y su hija. 20 hileras más
adelante, Andrés.
Adelante
nuestro, un matimonio medio veterano con un hijo de 11 años.
Ese vuelo medio que podría quedar
para el olvido. Ni fu ni fa. "Como ir a Paso de los Toros en Nuñez", dijera
Guille.
Se armó una especie de comunidad
del Chavo en el fondo, donde todos nos chusmeteamos todo, a donde íbamos, con quien viajábamos,
cuántos días y las gangas que conseguimos, bla bla bla…Llegamos a San Pablo.
Mi segunda mayor preocupación: Los aeropuertos. Una papa! Tanto San Pablo como Miami. Nada para decir. De
hecho en Miami nos quedamos como esperando “los trámites” y resulta que ya estábamos
afuera!
Ahora lo anecdótico de la nota…
Se puede decir que jamás había volado
tan alto, por lo tanto jamás había sentido esa sensación.
En el vuelo San Pablo Miami que fue toda la noche (salimos a las dos de la mañana y llegamos acà como a las ocho) vi noche y día. No pegué un ojo y no de nervios, sino de emoción.
Me cuesta un poco explicar. No tiene nada que ver con el viaje, ni los planes, ni los niños, ni Disney. Fue un vìnculo directo entre las nubes y yo.
Sentí que conecté de una extraña forma conmigo misma, me llené de la energía del mundo.
---------------------------------------------------------------------------------------
ATENCIÒN MOMENTO DE DELIRIO ENTRE LINEAS, PODÈS SALTEARTE ESA PARTE SIN PROBLEMAS, GRACIAS
---------------------------------------------------------------------------------------
De a ratos el aviòn se sacudía y decía a mi misma Puta, hacé bien las cosas Maru! el Flaco (Dios segùn mi amiga Kari) te está mandando un mensaje (y sí sí, tenía que meter una mala palabra para aplacar un poco lo de la conexión con la energía del mundo, y la metí al lado de Dios, porque yo soy yo...y sigo escribiendo porque ya empecé a delirar...)
----------------------------------------------------------------------------------------
Por fin entendí que cuando una
persona tiene grandes aspiraciones o consigue grandes logros se le dice que “voló
o quiere volar alto”. También entendí muchas otras cosas que trato de procesar
para poder explicar.
Ver el mundo desde arriba, las
nubes durante el día a mi costado, una de ellas dónde nacía un arcoíris. Ver
las estrellas a los lados y no hacia arriba. Mirar hacia abajo y ver las
ciudades de Brasil en la noche, que parecían pintadas de oro en la inmensidad de la tierra,
y yo ahí arriba, un puntito en el medio del inmenso Universo.
El avión se movió muchísimo.
Atravesamos una tormenta TREMENDA en Venezuela, hubo mucha turbulencia. Yo no
iba sola, además de ir con mi familia iba alguien más; estoy segura que no estaba sola.
La paz que sentí ahí arriba no se
si voy a volver a sentirla alguna vez. Creo que me encontré a mi misma. Creo
que encontré a la Maru que hace tiempo estoy buscando y tanto me ha costado
encontrar.
Me di cuenta que yo nací para
volar alto, que yo no puedo permitir que nada más me detenga.
Me di cuenta que yo
pertenezco a las alturas, que no tengo techo, que no tengo límites.
Cueste lo que me cueste
nunca más NADIE me va a atar al suelo y no dejarme despegar.
Yo ahora se quien
soy y quien quiero ser, y todo eso lo descubrí, en un paseo por las nubes.
27 feb 2015
Perros perdidos, el color del vestido y otros sucesos...
Durante el día de hoy, mucho se ha hablado sobre un vestido, que se viralizó rápidamente en las redes sociales y que x algún extraño motivo algunas personas ven Azul y negro y otras ven blanco y dorado. Esto ha desatado a un sin fin de chistes y memes al respecto - por cierto muy divertidos- que nos tiene a todos pendientes (para bien o mal) del tema...
Eso me hizo recordar una nota que hace mucho quería escribir sobre la viralización de las cosas...
Todos los días veo en mi TL de Facebook o Twitter, grandes cantidades de fotos de animales perdidos o encontrados, adolescentes desaparecidas, enfermos que buscan donaciones o cadenas de oración y hasta sorteos de celulares de última generación en páginas aparentemente oficiales.
Generalmente tiendo a compartir todas esas cosas (excepto la de los "regalos por decomiso de aduana, caja abierta, o #LaMarEnCoche" que #PorDiosTeLoPido es obvio que es una truchada); pero hace un tiempo me he dedicado a "explorar" la procedencia de los mensajes.
Generalmente cuando compartimos una foto, nuestros amigos ven la foto pero no ven su procedencia.
¿Adivinen qué?
El 90% de las veces, al ir a la raiz de la cuestión, descubro que el problema ya fue resuelto...
- El niño apareció (se había ido de la casa)
- El hombre ya murió (y su foto sigue in eternum circulando en las redes sociales y mortificando a toda su familia)
- El perrito Golden que iban a prender fuego y se encuentra en adopción responsable, está en México.
- Se buscaban donantes de sangre en Guadalajara hace tres años!!! La persona ya se recuperó...
- ...y todavía sigo esperando que Sony Ericcson me envíe los 500 dólares que me gané por reenviar el mail a todos mis contactos o que Facebook me cobre 9,99 dólares por ser miembro -ya que jamás comparti la foto-, también se me pasaron los cinco minutos en los que se me iba a cumplir el deseo de tener un auto, que le pedí a la vela de la prosperidad (y juro que envié la foto a las 25 personas que realmente se merecían que algo bueno surgiera en sus vidas)
Antes de compartir una foto...mirá en qué situación se encuentra, si realmente tiene coherencia y cuán importante es su difusión.
Eso va a ayudar a que no tengamos tantas fotos "basura" en nuestro TL y cuando alguien realmente necesite ayuda, podamos ser más efectivos y no "ignoremos" una más de esas cadenas...
Ahora te aconsejo compartas esta nota y etiquetes a 35 amigos en los próximos 30 segundos...
...o se te va a volcar un chorro de leche chocolatada en el fondo de la heladera, y te vas a dar cuenta tan tarde, que vas a tener que estar tres horas con la esponja refregando para sacar el pegote...
20 nov 2014
No es sólo una reflexión más...
Antes de empezar a escribir tuve que reformularme bien la “propuesta”.
No quiero caer como siempre en los viejos
balances anuales, esta vez no quiero ni positivos ni negativos.
Además, quiero aclarar que leí la nota del año pasado y si
la copiara y pegara este año, sería más o menos igual, así que mejor ni me
gasto.
Esta vez quiero hablar de otras cosas antes que “termine el
año”.
Prometo no nombrar al Positivo ni al pastor Jimenez, así que
desactiven tranquilos el AVAST/NORTON/AVG qué no hay campaña electoral por
estos lares.
Se está terminando el 2014 y yo recién estoy digiriendo el
final del 2013…
Qué nos está pasando che? Se nos va la vida…se nos va…Y
seguimos como perros persiguiéndonos la cola, intentando conseguir objetivos mucho
más lejanos de lo que podemos lograr,
sin tiempo de nada, descuidando nuestros afectos, o lo que es peor, a
nosotros mismos.
Estamos viviendo tiempos en los que decir lo que pensamos
(escudados en la impersonalidad de las redes sociales) se ha transformado en
caballito de batalla de muchos. Los tímidos ya no son tímidos, los
extrovertidos se van al carajo…y nos enteramos de la vida de Dios y todo el
mundo, solamente a través de un clic. Pero también estamos en tiempos de peleas, de rencores (me
borraste, me diste unfollow, me bloqueaste), de malos ratos AL PEDO, por destinar
nuestro tiempo a tareas equivocadas.
Espero que ya, desde hoy empecemos a administrar más
nuestros tiempos y menos nuestros
haberes. Que gastemos nuestro tiempo (y haberes) en estar con quienes
queremos estar. Que asumamos menos compromisos inalcanzables y nos llenemos de
pequeños instantes mágicos que se queden en nuestra memoria para siempre.
Que el año próximo nos agarre experientes en encuentros y
desencuentros. Que eliminemos de nuestra vida a quienes no nos hacen bien y nos
rodeemos de gente que quiera estar a nuestro lado…
Sólo eso, seamos mejores economistas del tiempo y estoy
segura que vamos a ser más felices…
Y no se olviden de algo…El dinero así como se va, puede
volver, pero el tiempo no se recupera jamás…
FELICES FIESTAS PARA TODOS!!!!
(Y no tiren bombas que a los perros les duelen los oídos, tómense
la plata en cervezas y vuelvan en taxi)
23 oct 2014
Día del Periodista
Hoy en Uruguay es el Día del Periodista. A decir verdad, no tenía ni idea qué se celebraba hoy y un poco de "atrevida" acepté algunas felicitaciones generales publicadas en las redes sociales por amigos y conocidos.
¿Por qué me siento periodista?
Allá por los comienzos del siglo XXI comenzaba mi corta vida en el mundo del periodismo.
Me acuerdo que cuándo comencé a estudiar, sucedieron los atentados a las Torres Gemelas en Nueva York, y ese fue el primer hecho histórico que marcó mi visión sobre el mundo. Para mi (como supongo que para millones y millones de personas) hay un antes y un después de ese día.
Todo el año había trabajado en la monografía final de Prensa para la UTU sobre la Anorexia. A pocos días de entregar el trabajo final (se entregaba el 04 de octubre, no me olvido más) pasaron los atentados y le di un giro rotundo a la investigación...Yo quiero hablar de esto!!
Para mi sorpresa, el trabajo que entregué (que era casi como un hijo) con extractos de editoriales como "Le monde diplomatique" o análisis del Real Instituto Elcano, alcanzó apenas a un 8, contra un interesantísimo trabajo sobre las razas de los perros que realizó una compañera (y que tuvo estampado un hermosísimo 10 que me provoca pesadillas hasta el día de hoy).
El argumento del profesor Daniel Braquet (a quién etiqueto y espero haga algún comentario al respecto) era que mi trabajo era oportuno pero no original, ya que todos los medios de prensa hablaban de las Torres gemelas en aquel entonces. (Obvio que ninguno de mis compañeros había hablado del tema pero a él se le ocurrió juzgarnos como si fueramos un medio de prensa de verdad)
Le contesté que iba a hacer un trabajo sobre "como cagan las palomas", que seguramente fuera oportuno por si algún día lo cagaba una, ya que quizás podría evitarlo o al menos explicarse como lo hizo, y sin dudas sería original. Le causó tanta gracia que en el examen oral (defensa de mi maltrecho trabajo periodístico) me hizo contarle la historia al veterano que lo acompañaba en la mesa del examen. El veterano no entendió mucho el chiste, pero él yo yo nos reímos mucho (confieso que en ese momento yo me reía de compromiso para levantar el ocho en el oral y mi honor periodístico).
Al año siguiente me peleé con el profesor de Sociología. Gracias a Braquet no dí libre el examen, pero tenía que entregar la monografía final a tiempo.
Claro que todos hicieron estudios sociológicos sobre la pobreza, bla bla bla...
¿¿¿Pues yo qué hice??? "Los medios de comunicación y el Islam ". Debe haber sido el trabajo más divino que hice en mi vida. Aprendí mucho sobre la diferencia del Islamismo y el fundamentalismo islámico. Casi podía sentarme a discutir con quién sea...
Pero al llegar al oral lo primero que me dijo el profesor fue; "¿A ver que tiene para decir la defensora de Bin Laden?"
¡¡El tipejo no había leído mi monografía!! (que defendía bastante al islam, por cierto, pero no mencionaba a Bin Laden en lo más mínimo).
Ahí se fue mi segunda decepción periodística, y todavía no había empezado mi carrera...
La UTU fueron dos años alucinantes, intensos, llenos de peleas, quilombetes y otras cosas, algunas de las que me arrepiento, y otras que recuerdo y me causan mucha gracia. Tengo todavía por ahí las bolufrases que anotabamos con los dichos de los profesores y compañeros. Una época sin dudas de las más lindas de mi juventud...
Al año siguiente al recibirme comencé a trabajar en VTV, como panelista en "Las cosas por su nombre" un talk show conducido por la genia Silvia Novarese, y que iba de lunes a viernes en vivo durante dos horas. En ese programa aprendí a hablar "DE LO QUE SEA", un día hablabamos del SIDA y otro día hablabamos de la moda, o de tal o cuál ley.
De esa tribunita salieron grosos de la TV como Juan Sebastián Rodriguez (gran secuaz) o Sebastián Giovanelli, y otras como Mónica Lorenzo (que robaba el micrófono para salir al aire y me hacía calentar hasta explotar) que también hoy sale en TV. También se escucha por radio mi otro secuaz Martín Cardoner y está en Galería Carina Fossatti con quien no compartí tiempo al aire pero que también supo ser parte de la tribuna.
De esa montaña rusa de temáticas pasé a Camino al País donde sin dudas me fogueé como periodista (y descubrí cuan mala puedo ser televisivamente).
Ahí grabé las peores entrevistas e hice los peores copetes de mi vida (lo mío sin dudas era la prensa escrita) pero aprendí en menos de un año lo que creo no he aprendido laboralmente en toda mi vida.
Otra montaña rusa, totalmente distinta. Trabajaba de sol a sol, viajaba los fines de semana.
En cada pueblo me encontraba un pariente o un conocido (recorríamos Uruguay con Rossana Crosta y Fernando Castro, conductora y camarógrafo). Ese año también escribí la crónica de nuestros viajes en Últimas Noticias. Algún día escanearé algún artículo y lo colgaré en este blog.
Podría pasar horas escribiendo anécdotas de esa época, pero voy a contar una sola, que para mi define lo que es un periodista.
Estábamos en Buenos Aires, en la Feria Internacional de Turismo, de golpe, una avalancha de periodistas corren hacia un lugar. Corrimos nosotros también y pude ver una imagen que jamás se me va a olvidar. En el tumultuoso enredijo de periodistas, micrófonos, cámaras y camarógrafos Rossana se hizo paso, con los codos hacia un lado y hacia el otro, y accedió a entrevistar a Anibal Ibarra (el entonces gobernador de la provincia de Buenos Aires). Solo tres preguntas se hicieron en ese pequeño instante periodístico. Dos las hizo ella y terminó con un saludo para Uruguay. Minutos más tarde, la vi correr y entrevistar (mientras corría) a Daniel Scioli el entonces vicepresidente de la Nación. Fue la única que continuó corriendo hasta alcanzarlo.
El periodismo es eso. Es hacerse lugar. Es hablar de lo que haya que hablar, en el momento en que se necesite. A veces es un lugar un poco duro, porque no siempre se sabe lo que se dice o porque tenemos que hacernos lugar entre los demás. A veces la de al lado te roba el micrófono y se hace su lugar.
Es un lugar de extrema responsabilidad, dónde lo que se dice puede arruinarle la vida a otro, por ejemplo.
Un verdadero periodista no se marea con los aplausos o se encandila con las luces de un estudio de TV. Un verdadero periodista hace las cosas por el placer de informar.
Para finalizar, quiero recordar al Gato Artola, a quién le hice mi primer entrevista y me sacó el cuaderno dónde tenía anotadas las preguntas y me dio una de las mayores enseñanzas. "Aprendé a escuchar a quién está entrevistando y no vas a necesitar ningún cuadernito" =)
Hace tiempo me alejé de ese camino...pero sigo creyéndome periodista. Porque todavía en mi corazón siento la necesidad de saber, la necesidad de transmitir, y la responsabilidad de hacerlo bien.
¿Por qué me siento periodista?
Allá por los comienzos del siglo XXI comenzaba mi corta vida en el mundo del periodismo.
Me acuerdo que cuándo comencé a estudiar, sucedieron los atentados a las Torres Gemelas en Nueva York, y ese fue el primer hecho histórico que marcó mi visión sobre el mundo. Para mi (como supongo que para millones y millones de personas) hay un antes y un después de ese día.
Todo el año había trabajado en la monografía final de Prensa para la UTU sobre la Anorexia. A pocos días de entregar el trabajo final (se entregaba el 04 de octubre, no me olvido más) pasaron los atentados y le di un giro rotundo a la investigación...Yo quiero hablar de esto!!
Para mi sorpresa, el trabajo que entregué (que era casi como un hijo) con extractos de editoriales como "Le monde diplomatique" o análisis del Real Instituto Elcano, alcanzó apenas a un 8, contra un interesantísimo trabajo sobre las razas de los perros que realizó una compañera (y que tuvo estampado un hermosísimo 10 que me provoca pesadillas hasta el día de hoy).
El argumento del profesor Daniel Braquet (a quién etiqueto y espero haga algún comentario al respecto) era que mi trabajo era oportuno pero no original, ya que todos los medios de prensa hablaban de las Torres gemelas en aquel entonces. (Obvio que ninguno de mis compañeros había hablado del tema pero a él se le ocurrió juzgarnos como si fueramos un medio de prensa de verdad)
Le contesté que iba a hacer un trabajo sobre "como cagan las palomas", que seguramente fuera oportuno por si algún día lo cagaba una, ya que quizás podría evitarlo o al menos explicarse como lo hizo, y sin dudas sería original. Le causó tanta gracia que en el examen oral (defensa de mi maltrecho trabajo periodístico) me hizo contarle la historia al veterano que lo acompañaba en la mesa del examen. El veterano no entendió mucho el chiste, pero él yo yo nos reímos mucho (confieso que en ese momento yo me reía de compromiso para levantar el ocho en el oral y mi honor periodístico).
Al año siguiente me peleé con el profesor de Sociología. Gracias a Braquet no dí libre el examen, pero tenía que entregar la monografía final a tiempo.
Claro que todos hicieron estudios sociológicos sobre la pobreza, bla bla bla...
¿¿¿Pues yo qué hice??? "Los medios de comunicación y el Islam ". Debe haber sido el trabajo más divino que hice en mi vida. Aprendí mucho sobre la diferencia del Islamismo y el fundamentalismo islámico. Casi podía sentarme a discutir con quién sea...
Pero al llegar al oral lo primero que me dijo el profesor fue; "¿A ver que tiene para decir la defensora de Bin Laden?"
¡¡El tipejo no había leído mi monografía!! (que defendía bastante al islam, por cierto, pero no mencionaba a Bin Laden en lo más mínimo).
Ahí se fue mi segunda decepción periodística, y todavía no había empezado mi carrera...
La UTU fueron dos años alucinantes, intensos, llenos de peleas, quilombetes y otras cosas, algunas de las que me arrepiento, y otras que recuerdo y me causan mucha gracia. Tengo todavía por ahí las bolufrases que anotabamos con los dichos de los profesores y compañeros. Una época sin dudas de las más lindas de mi juventud...
Al año siguiente al recibirme comencé a trabajar en VTV, como panelista en "Las cosas por su nombre" un talk show conducido por la genia Silvia Novarese, y que iba de lunes a viernes en vivo durante dos horas. En ese programa aprendí a hablar "DE LO QUE SEA", un día hablabamos del SIDA y otro día hablabamos de la moda, o de tal o cuál ley.
De esa tribunita salieron grosos de la TV como Juan Sebastián Rodriguez (gran secuaz) o Sebastián Giovanelli, y otras como Mónica Lorenzo (que robaba el micrófono para salir al aire y me hacía calentar hasta explotar) que también hoy sale en TV. También se escucha por radio mi otro secuaz Martín Cardoner y está en Galería Carina Fossatti con quien no compartí tiempo al aire pero que también supo ser parte de la tribuna.
De esa montaña rusa de temáticas pasé a Camino al País donde sin dudas me fogueé como periodista (y descubrí cuan mala puedo ser televisivamente).
Ahí grabé las peores entrevistas e hice los peores copetes de mi vida (lo mío sin dudas era la prensa escrita) pero aprendí en menos de un año lo que creo no he aprendido laboralmente en toda mi vida.
Otra montaña rusa, totalmente distinta. Trabajaba de sol a sol, viajaba los fines de semana.
En cada pueblo me encontraba un pariente o un conocido (recorríamos Uruguay con Rossana Crosta y Fernando Castro, conductora y camarógrafo). Ese año también escribí la crónica de nuestros viajes en Últimas Noticias. Algún día escanearé algún artículo y lo colgaré en este blog.
Podría pasar horas escribiendo anécdotas de esa época, pero voy a contar una sola, que para mi define lo que es un periodista.
Estábamos en Buenos Aires, en la Feria Internacional de Turismo, de golpe, una avalancha de periodistas corren hacia un lugar. Corrimos nosotros también y pude ver una imagen que jamás se me va a olvidar. En el tumultuoso enredijo de periodistas, micrófonos, cámaras y camarógrafos Rossana se hizo paso, con los codos hacia un lado y hacia el otro, y accedió a entrevistar a Anibal Ibarra (el entonces gobernador de la provincia de Buenos Aires). Solo tres preguntas se hicieron en ese pequeño instante periodístico. Dos las hizo ella y terminó con un saludo para Uruguay. Minutos más tarde, la vi correr y entrevistar (mientras corría) a Daniel Scioli el entonces vicepresidente de la Nación. Fue la única que continuó corriendo hasta alcanzarlo.
El periodismo es eso. Es hacerse lugar. Es hablar de lo que haya que hablar, en el momento en que se necesite. A veces es un lugar un poco duro, porque no siempre se sabe lo que se dice o porque tenemos que hacernos lugar entre los demás. A veces la de al lado te roba el micrófono y se hace su lugar.
Es un lugar de extrema responsabilidad, dónde lo que se dice puede arruinarle la vida a otro, por ejemplo.
Un verdadero periodista no se marea con los aplausos o se encandila con las luces de un estudio de TV. Un verdadero periodista hace las cosas por el placer de informar.
Para finalizar, quiero recordar al Gato Artola, a quién le hice mi primer entrevista y me sacó el cuaderno dónde tenía anotadas las preguntas y me dio una de las mayores enseñanzas. "Aprendé a escuchar a quién está entrevistando y no vas a necesitar ningún cuadernito" =)
Hace tiempo me alejé de ese camino...pero sigo creyéndome periodista. Porque todavía en mi corazón siento la necesidad de saber, la necesidad de transmitir, y la responsabilidad de hacerlo bien.
12 jul 2014
Valores
Me considero una persona "pensante". Algunos podrán pensar igual que yo, parecido o distinto, pero yo, no puedo dejar de ver y pensar, lo que sucede a mi alrededor y en el mundo.
A veces desde lejos es difícil tomar posición sobre determinados temas. Quizás porque vivimos en un mundo en donde se nos enseña a encasillar, rotular, estigmatizar; y además -para colmo- se nos adoctrina y dice que si pensamos de determinada manera, tenemos que suscribir determinadas situaciones.
ME NIEGO!
Quiero pensar libremente sobre cada caso, sin ataduras políticas, religiosas, sociales o culturales. Quiero mi propia vara del bien y del mal, la que me dicta mi corazón, la que nadie puede refutar en mi consciencia.
Mi hermano -una de las personas más sabias que conozco- me enseñó a pensar a través de "valores" o "principios" que son inalterables, que pueden encajar en cada situación y forjar una postura.
Pero es difícil denfinir estos valores, porque para que cuadren en un pensamiento general, tienen que ser irrefutables. La primera vez que discutimos sobre este tema, pensé...sin dudas creo en la igualdad.
Y seguí pensando y pensando, entonces llegué a la conclusión en que mis valores o principios irrefutables pueden llegar a no estar tan definidos con una sola palabra, sino con actitudes.
Soy una persona que he sufrido mucho la intolerancia en mi vida, pero que sin embargo, ese sufrimiento me ha ayudado a reforzar mis valores. Nunca estigmatizaría a nadie por NADA. Veo corazones y no religiones, razas o ideologías políticas.
A veces desde lejos es difícil tomar posición sobre determinados temas. Quizás porque vivimos en un mundo en donde se nos enseña a encasillar, rotular, estigmatizar; y además -para colmo- se nos adoctrina y dice que si pensamos de determinada manera, tenemos que suscribir determinadas situaciones.
ME NIEGO!
Quiero pensar libremente sobre cada caso, sin ataduras políticas, religiosas, sociales o culturales. Quiero mi propia vara del bien y del mal, la que me dicta mi corazón, la que nadie puede refutar en mi consciencia.
Mi hermano -una de las personas más sabias que conozco- me enseñó a pensar a través de "valores" o "principios" que son inalterables, que pueden encajar en cada situación y forjar una postura.
Pero es difícil denfinir estos valores, porque para que cuadren en un pensamiento general, tienen que ser irrefutables. La primera vez que discutimos sobre este tema, pensé...sin dudas creo en la igualdad.
Él me dijo, en qué igualdad crees? En la igualdad del hombre y la mujer? Si no son iguales, unos son hombres y otros son mujeres, de hecho si te comparás con otra mujer, tampoco sos igual. Cuánta razón, ni las manzanas son todas iguales!
Pensé en la justicia a lo que respondió. De qué justicia hablás? La justicia divina? La justicia penal? Lo que es justo para vos, es justo en otras partes del mundo?
Pucha pensé...esto no va a ser fácil.
Y seguí pensando y pensando, entonces llegué a la conclusión en que mis valores o principios irrefutables pueden llegar a no estar tan definidos con una sola palabra, sino con actitudes.
Creo en la generosidad y la aplico. Me considero una persona generosa y con eso siento que aporto mi entorno algo más que mi sola presencia.
Creo en que uno debe predicar siempre con el ejemplo y vivir acorde a lo que dice que piensa.
Creo en el respeto y la tolerancia, aunque a veces saldría a gritar "mis verdades" a gritos.
Soy una persona que he sufrido mucho la intolerancia en mi vida, pero que sin embargo, ese sufrimiento me ha ayudado a reforzar mis valores. Nunca estigmatizaría a nadie por NADA. Veo corazones y no religiones, razas o ideologías políticas.
A veces concuerdo más con unos que con otros, como todos.
A veces "como te digo una cosa te digo la otra", pero considero que es parte del aprendizaje de la vida. Nada es tan rígido, el pensamiento es lo más volátil que puede existir. Hoy pensás esto, mañana pensás aquello...ahora, lo sostenés? Vivis acorde a ello?
A veces "como te digo una cosa te digo la otra", pero considero que es parte del aprendizaje de la vida. Nada es tan rígido, el pensamiento es lo más volátil que puede existir. Hoy pensás esto, mañana pensás aquello...ahora, lo sostenés? Vivis acorde a ello?
En tiempos como los de hoy, en los que veo que muchas veces se escucha la campana más fuerte, en el que como ganado compartimos ideologías de otros, muchas veces mal intencionadas o direccionadas hacia fines que nada tienen que ver con los valores o principios de los que hablaba.
Seamos libres de pensamiento. Formemos nuestros propios conceptos de las cosas, de las situaciones y hasta de las personas.
Seamos más autocríticos, vivamos más acorde a lo que pensamos. Respetemos, toleremos, colaboremos para que este mundo sea al menos un poquito mejor. Eso está a nuestro alcance.
Sir Nicholas Winton, un hombre que salvó 669 niños de los campos de concentración en Alemania, decía "Si algo no es obviamente imposible, entonces debe haber una manera de conseguirlo".
Te invito a encontrar tus valores y vivir acorde a ellos.
27 may 2014
El mejor remedio, la risa
Pueden pasar cosas terribles, podemos ver injusticias, sentirnos indefensos ante ciertas cosas, pero hay algo que nadie nos puede sacar...y eso es la risa.
La risa libera, renueva, cura...la risa es el mejor remedio...
La risa libera, renueva, cura...la risa es el mejor remedio...
28 feb 2014
De cabeza contra la pared
Sin duda el que te quiere siempre trata de amortiguarte el golpe.
Cuántas veces deseé ser colchón para que a mi hija no le doliera desilusionarse!!!
Pero claro!! Darse la cabeza contra la pared es parte de los aprendizajes de la vida y por más que uno quiera o intente zafar, de eso se trata este viaje...de aprender.
Toda mi vida se me ha enseñado a ser positiva, por lo que me resisto a victimizarme cuando algo no me sale. Pero me duele, me calienta, me indigna.
Estoy en uno de esos momentos en el que "las cosas por algo pasan" o "seguro que si te pasó es porque eso no era para vos" son frases que me resisto a querer incorporar.
Soy una persona que no le pide grandes cosas a la vida. Yo estoy agradecida de lo que tengo y de como lo tengo.
Soy feliz de tener una familia hermosa, de la que vengo y la que formé.
Tengo la mayor bendición que una persona podría tener; dos hijos sanos y hermosos que me llenan la vida de alegría.
Pero esto no se trata de eso. Todo lo que tengo me lo he ganado.
He sido una buena esposa, una buena madre, una buena hija y una buena persona. Las cosas me cuestan mucho, pero lucho por conseguirlas. Me considero alguien que no baja los brazos jamás.
Sin embargo...sin darme cuenta, fui abandonando mis sueños. No los sueños de esposa, o los sueños de madre. Los sueños de Maru.
Hace poco una pequeña lucecita me llevó a querer ir tras ellos nuevamente. Era chiquita, remota, muy muy lejana, pero yo la transformé en sol y me tiré de lleno hacia ella.
Sueños, allá vamos!!!!
Aquella frase que hice tan mía "Mientras el tímido reflexiona, el valiente va, triunfa y vuelve" se hizo realidad. Allá iba!!!
Pero apareció la pared...
No hay colchón que amortigue este golpe...
Es inevitable...
Solo prometo aprender también esta vez...aunque me sienta triste, indignada y con ganas de mandar a más de uno a la mismísima mierda...
Suscribirse a:
Entradas (Atom)